Sin palabras. En una deleznable actitud, que lo fotografía de cuerpo entero, el chapulín morenista Raúl Paz Alonso se da el lujo de burlarse de la democracia mexicana, de las elecciones del próximo 2 de junio y de un electorado que nunca votarían por políticos como él, quien contento con la candidatura plurinominal de Morena que le asegura seguir mamando de la ubre presupuestal, se da el lujo de vacacionar en Estados Unidos y Londres en plena campaña.
Una vez más, Raúl Paz prioriza sus propios intereses en lugar de apoyar a su partido Morena. En vez de respaldar a su partido y trabajar por el bienestar de la comunidad, ha optado por irse de paseo a Londres.
Es decepcionante ver cómo algunos prefieren sus comodidades personales en lugar de comprometerse con la causa que dicen representar. Pero Raúl Paz y sus turbios negocios en el Tren Maya, a través de sus nexos con la CATEM (Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México) sabe que tiene asegurado su lugar en el erario para los próximos tres años para seguir disfrutando de una vida de lujo a expensas de los verdaderos ideales de Morena y de los ciudadanos a quienes debería servir.
Esta actitud egoísta y desleal deja en evidencia la verdadera cara de aquellos que solo utilizan a Morena y a sus seguidores para su propio beneficio. Es momento de reflexionar y exigir responsabilidad y compromiso real a quienes dicen representarnos.
