Uber ha dado un paso importante en su apuesta por la movilidad autónoma al anunciar un nuevo programa global de robotaxis premium en colaboración con Lucid Motors y la empresa tecnológica Nuro.
Este ambicioso proyecto contempla la adquisición de al menos 20,000 vehículos eléctricos Lucid Gravity equipados con el software autónomo de nivel 4 desarrollado por Nuro. Los autos estarán integrados en la plataforma y sistemas de gestión de flotas de Uber y se espera que el servicio comience a operar en una gran ciudad estadounidense en 2026.
Actualmente, ya se están realizando pruebas con prototipos en las instalaciones de Nuro en Las Vegas, mostrando avances significativos en la tecnología autónoma que será implementada.
Inversiones millonarias y respaldo tecnológico
Uber planea invertir cerca de 300 millones de dólares en Lucid, sumado a una inversión similar destinada a Nuro para impulsar el desarrollo del software y hardware necesarios para este proyecto.
Dara Khosrowshahi, CEO de Uber, manifestó su entusiasmo por esta colaboración:
“Estamos orgullosos de trabajar junto a Nuro y Lucid en un programa de robotaxis diseñado exclusivamente para Uber, que permitirá a más personas acceder a los beneficios de la conducción autónoma alrededor del mundo”.
Marc Winterhoff, CEO interino de Lucid, destacó que este acuerdo refuerza la confianza en la avanzada arquitectura tecnológica de la compañía:
“Este es un paso crucial para ampliar nuestra innovación en uno de los mercados más prometedores y de mayor crecimiento global”.
Reacción en el mercado y futuro de Lucid
Tras la noticia, las acciones de Lucid experimentaron un aumento superior al 36%, reflejando la positiva recepción del mercado ante esta alianza estratégica. Lucid también reportó fuertes cifras de entrega en el segundo trimestre y apunta a cumplir su objetivo de distribuir 20,000 unidades de sus modelos Air y Gravity durante el 2025.
Una competencia creciente en el sector de robotaxis
Este proyecto posiciona a Uber para competir de forma directa con otros grandes jugadores en el campo de la conducción autónoma, como Waymo y Tesla. Waymo, propiedad de Alphabet, mantiene operaciones consolidadas en varias ciudades de Estados Unidos, mientras Tesla continúa expandiendo sus pruebas en zonas como Austin y San Francisco.
Uber, que anteriormente detuvo su programa de robotaxis tras un accidente fatal en 2018, regresa con una nueva estrategia y el apoyo de socios tecnológicos líderes para establecerse como un actor clave en este mercado emergente.