El Gobierno del Estado de Yucatán ha destapado un grave caso de corrupción dentro del Registro Civil, donde funcionarios expidieron actas falsas de nacimiento, matrimonio y defunción. Ante esta situación, las autoridades han anunciado acciones legales contundentes, con dos denuncias formales:
- Una penal, que será presentada ante la Fiscalía General del Estado.
- Una administrativa, interpuesta ante el Órgano Interno de Control de la Secretaría de la Contraloría General.
Delitos y sanciones en puerta
El gobierno ha revelado que, además de la expedición ilegal de actas, se detectaron otras irregularidades graves, como:
- Falsificación de documentos oficiales.
- Expedición de actas sin facultades legales.
- Uso indebido del Sistema Nacional de Registro de Identidad (SID).
- Falta de integración de la documentación requerida.
- Posible daño patrimonial o afectación a terceros.
Estos delitos no solo podrían costarles el cargo a los involucrados, sino que podrían enfrentar sanciones administrativas severas como destitución, inhabilitación y consecuencias penales.
Actas falsas en manos de migrantes
El escándalo tomó mayor dimensión cuando se descubrió que algunas de estas actas falsas estaban en poder de indocumentados, presuntamente centroamericanos. De acuerdo con información publicada en la columna Plaza Grande de Diario de Yucatán, estos documentos fueron expedidos con papel oficial del Registro Civil, pero con datos completamente falsos.
¿Cómo se detectó el fraude?
Reportes indican que el fraude salió a la luz tras el análisis del historial de sesiones del SID, el sistema que maneja la identidad de los ciudadanos. Se encontraron cuentas de usuario inhabilitadas que fueron utilizadas sin autorización desde equipos asignados al Departamento de Informática del Registro Civil.
Ante esta situación, el Gobierno del Estado tomó medidas inmediatas:
- Desactivó nuevamente las cuentas fraudulentas.
- Detectó intentos de acceso posteriores, lo que evidencia una intención de seguir con las irregularidades.
¿Y ahora qué sigue?
El gobierno no ha precisado en qué período exacto se cometieron los ilícitos ni cuántas personas están implicadas. Sin embargo, esta no es la primera vez que se detectan actas falsas en Yucatán. Casos similares ocurrieron en 2003 y 2008, cuando migrantes centroamericanos intentaron obtener documentación falsa para hacerse pasar por ciudadanos mexicanos.
Las autoridades prometen castigo ejemplar, pero la gran pregunta es: ¿quedará en el olvido como las veces anteriores, o esta vez habrá justicia?
¿Qué opinas de este escándalo? ¿Qué sanción deberían recibir los funcionarios corruptos? Déjanos tu comentario.
